Te guste o no, ALESSANDRO MICHELE se ha convertido en el protagonista de este año que acaba. En un tiempo record, ha sacado a la firma GUCCI del ostracismo en el que estaba cayendo para convertirlo en el gran referente y en un éxito de ventas. Su colecciones han sufrido una transformación paso a paso, pero no cambios radicales cada cambio de temporada. Esto puede producir la sensación de que siempre es lo mismo, peor la realidad es otra. Sobre la base que marcó para el invierno del 2017, presentación para presentación, ha ido añadiendo nuevos elementos que ya se han vuelto icónicos. Sus bordados de influencia japonesa, sus serpientes, sus abejas, sus mezclas imposibles, la explosión de color, la exageración en los complementos, son ya toda una seña de identidad. Un mundo donde pasado, presente y futuro se dan la mano y así ha sido en su colección PRE-FALL 2017. Seguimos viendo elementos de otras colecciones pero sin embargo, son nuevo los protagonistas que se incorporan en este nuevo capitulo. Las prendas active-wear están mucho más presentes, recupera el legging y son numerosos los estampados de maxi flores. Vemos bombers, pantalones superpuestos a otros pantalones mientras que los vestidos de noche se simplifican. Lo que queda evidente al ver el tamaño de sus colecciones es que MICHELE desborda ideas y más ideas y GUCCI está decidido a aprovecharlo al máximo.

José Ramón Rocabert.