Tras pasar por la desaparecida (o en pausa, como ellos dicen) MADRID FASHION SHOW o por la 080 BARCELONA, la temporada pasada coincidiendo con la apertura de su nueva tienda en la ciudad condal, GARCIA MADRID vuelve a sus orígenes, buscando hacer presentaciones fueran de los circuitos habituales. La pista de la sala ALCALA 20, iluminada con focos rojos y penumbra a su alrededor, era el lugar elegido para presentar una de sus colecciones más sobrias, anticipando una noche de contrastes. El pianista JAVIER COBLE, compositor y colaborador habitual del CENTRO DRAMÁTICO NACIONAL, recibía a los invitados tocando en su piano piezas de su propio repertorio y del autor ERIK SATIE (fuente de inspiración para el INVIERNO 2017) en contrapunto a la artista CINTIA LUND, encargada de la banda sonora del desfile. La nueva colección es una colección para sentirla, para llevarla. Una colección relajada, tanto visualmente como formalmente. Prendas que fluyen alrededor del cuerpo, dándole presencia pero sin aprisionarlo. Una colección donde la sencillez del exterior oculta una complejidad interior reflejada a la hora de trabajar los patrones, de situar las costuras o las pinzas. Looks que huyen del espectáculo y que buscan reafirmar el carácter de quién las lleva, como pudimos ver en uno de los casting más personales de la firma. Una colección que parece buscar más reafirmar a una clientela fiel, que venderse al mejor postor. Una clientela más preocupada en sentirse que en lucirse. En definitiva, una recuperación de los principios clásicos del lujo y el buen gusto.

José Ramón Rocabert.