No podemos negar que comenzar la semana de la MBFWM en el REAL JARDIN BOTÁNICO es mucho más apetecible que la fría moqueta de los pabellones de IFEMA. La decisión de CHARO IZQUIERDO de integrar la semana de la moda en la ciudad de Madrid, no sólo es más seductor como espectador, sino también como creador. El escenario de ayer no podía ser mejor para dar el broche de oro a la propuesta de MOISES NIETO para el VERANO 2018. Una colección con siete personalidades distintas pero con un denominador común: sus sentimientos hacia un personaje tan complejo como PICASSO. Siete mujeres que a su manera ejercieron una influencia en la obra del pintor al mismo tiempo que sufrían su propio drama personal fruto de un amor no del todo correspondido. Fluidez es el primer adjetivo que nos viene a la mente al observar esta última propuesta. Una fluidez que nos sorprende en un diseñador que nos tenía acostumbrados a siluetas más estructuradas y sólidas. Ligeros algodones para construir elaborados patrones que buscan envolver a la mujer al mismo tiempo tienden hacia una simetría. Un paleta de color plana de tonos empolvados. Lazadas imprevistas como señal de un feminidad con una fuerte personalidad. Eliminación de detalles superfluos, como sus camisas sin abotonaduras, en contraste con los grandes pendientes que rematan unos looks mucho más maduros. MOISES se nos hace mayor... sin que esto reste un ápice de frescura a su propuesta.