No nos puede gustar más cuando Karl Lagerfeld decide unir mundos que parece que no tienen nada en común, en su afán de que todo se puede convertir en un objeto de lujo.

En esta ocasión, en honor a la Copa Mundial de Rugby, ha sido el balón de este deporte el elegido para formar parte de la colección de Chanel. Algo tampoco tan descabellado si pensamos que Gabrielle Chanel ha tomado siempre muchos elementos del vestuario de deporte masculino para adaptarlo a sus creaciones.

En cuatro colores, negro, burdeos, marino y blanco, se pueden conseguir por encargo.

Nosotros ya hemos encontrado la excusa para aficionarnos a este deporte.